De media nos pasamos un tercio de nuestra vida durmiendo. El sueño es vital para el aprendizaje de la memoria y fundamental para el organismo. Sin embargo, no siempre es fácil caer entre los brazos de Morfeo. Si se lucha cotidianamente para encontrar el sueño, o si simplemente se necesita reposo, estos son algunos remedios para dormir mejor.
Optar por una comida ideal antes de dormir
Antes de dormir, no se debe comer ni demasiado poco ni en exceso, justo lo que conviene. Se deben priorizar los azúcares lentos como la pasta, el arroz, el trigo, y sobre todo, evitar una cena demasiado rica en proteínas.
Beber una infusión
Algunas plantas favorecen el sueño. Por ejemplo, una infusión de manzanilla, de verbena, de azahar, de tila o de valeriana 30 minutos antes de acostarse ayuda a recuperar el sueño.
Beber leche caliente
Si no os gustan mucho las tisanas, se puede beber un vaso de leche caliente con una cucharada sopera de miel. Se trata de un remedio natural muy eficaz que además ayuda a tranquilizarse.
Utilizar aceite esencial de lavanda
Igualmente, se n difundir algunas gotas de aceite esencial de lavanda en el dormitorio, 30 minutos antes de acostarse. Si no se dispone de un difusor, se puede colocar una gota sobre la almohada.
Crear un ritual para acostarse
El ritual para acostarse puede ser indispensable para dormirse rápidamente. Leer, escuchar música, darse un baño, etcétera.
Escuchar el cuerpo
Conviene acostarse ante el menor signo de sueño, como pueden ser los bostezos, la nuca recta, picor de ojos, etcétera. Si no se escuchan los signos del cuerpo, habrá que esperar al próximo ciclo del sueño.
Conservar el mismo ritmo
Con el fin de no perturbar el reloj biológico, conviene mantener una hora para acostarse y una hora para levantarse, tanto durante la semana como durante el fin de semana, siempre que sea posible.
Regular la temperatura del dormitorio
Regular la temperatura del dormitorio a 20 grados como máximo. Si hace demasiado calor, conviene ventilar justo antes de dormir con el fin de recuperar la temperatura más correcta.
Olvidarse de pensar
Hacer el vacío en la cabeza. Anotar en un cuaderno todo lo que preocupa o aquello que se debe hacer al día siguiente, con el fin de no tener que pensar durante la noche. Meditar y concentrarse en la respiración.
Dormir en la oscuridad
Algunas personas consiguen dormir mejor en la oscuridad total. En este caso, conviene apagar todas las luces. Si el despertador es digital, conviene cubrirlo con una tela negra. Si todavía hay algo de luz, se puede utilizar un antifaz ocular.